Esto en concordancia total con la salida del escandaloso ministro del interior, quien manifestó: “¡Nos dieron papaya!”. Lo que obliga a tratar de explicar a qué se refiere la expresión “Dar Papaya”.
En la red se lee que “Dar Papaya” consiste en: “Dar una oportunidad o facilitar algo a alguien donde existe la posibilidad de ser engañado o aprovechado”. Y también: “Propiciar una situación que puede ser potencialmente mala para sí mismo”. Más brevemente: “Dar oportunidad para que algo pase con énfasis en algo negativo”.
¡Ahí está el detalle! Como diría el cómico genial Cantinflas. El insidioso ministro del interior tiene razón porque, entre otras cosas, es precisamente lo que ha venido ocurriendo desde hace unos setenta años en Colombia. Continuamente se le ha estado “dando papaya” al movimiento de extrema izquierda, el comunismo internacional denominado como el mamertismo criollo y últimamente como el Pacto Histórico, para que “pase lo que está pasando”. Se le ha estado dando abundante “papaya” y ahora viene por más.
La “tozudez de los hechos” lo confirma. Aclarando que el hecho de “dar papaya” se designa también como un “papayazo”. Entre los muchos “papayazos” ocurridos en el devenir nacional, vale la pena destacar los de índole política, como los siguientes otorgados a la extrema izquierda:
Se “dio papaya” con el espurio acuerdo Santos-FARC, de La Habana, con el consabido plebiscito y las actuaciones de la Corte Constitucional,
Se “dio papaya” con las amnistías como la del M-19 incluyendo la gran traición a la Patria, como fue la toma del Palacio de Justicia.
Se “dio papaya” con los comportamientos de diversos estamentos como la Corte Suprema de Justicia, CSJ, en el caso del exministro Andrés Felipe Arias, el Consejo Nacional Electoral, CNE, “enredando la pita” en el “asunto” de las últimas elecciones y la Comisión de “Absoluciones del Congreso”, repartiendo “papaya” a manos llenas y a la siniestra”.
Se “dio papaya” con muchos otros hechos significativos que lograron llevar a la presidencia al actual mandatario.
Y entre los congresistas denominados muy eufemísticamente como “los padres de la patria”, se repartió siempre la denominada mermelada o sea “la repartición descarada de sobornos” por parte del gobierno de turno, para que muchos de sus miembros vendan su integridad supuesta. Al respecto, parece ser que la más popular de dichas jaleas era la de “papaya”, porque en muchos casos, fue el pueblo quien, con su voto, les “dio papaya”. ¡El que entendió, entendió!
Uno de los corolarios más importantes del “undécimo mandamiento”, es el que establece que: “¡Papaya servida, papaya comida!”. El resultado inmediato es el permanente abuso del poder cohonestado por la “papaya” que al gobierno actual le ofrecen, permanentemente, los entes de control. La demostración actual de tal abuso, la constituye el llamado actual del mandatario a una Consulta Popular, incluyendo el día cívico y los apoyos financieros y logísticos con la “plata del míster”.
Claramente, la violación de este “undécimo mandamiento” está arrojando al pueblo colombiano a “las tinieblas exteriores”, del caos, la inseguridad, la enfermedad, la corrupción y la muerte.
En general, es preciso, entonces, cortar de inmediato y de raíz, empezando, claro, con el ministro del interior, el ofrecimiento de “papaya” para los camaradas sediciosos del Pacto Histórico que propugnan la pérdida de la “libertad y el orden” y, en fin, de la democracia.
Por ejemplo: En vísperas de la ya denominada “marcha de Petro», no tiene ninguna presentación que en un reportaje (¿publirreportaje?) reciente del diario El Colombiano, se describe al inescrupuloso ministro del interior en los siguientes términos:
“Si hay una persona que TENGA LA HABILIDAD de cambiar todos los escenarios EN SU FAVOR en el país político es Armando Benedetti” y más adelante también: “Cuando lo tuvo todo en contra (acusaciones de su propia esposa, INVESTIGACIONES POR CORRUPCIÓN y el aislamiento diplomático) LOGRÓ CAMBIAR las cartas y ganar”.
¡Así cualquiera! ¡Vaya, Vaya con el PAPAYAZO!
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.