Afirmó el filósofo inglés Thomas Hobbes en 1651: “El hombre es lobo para el hombre”. Esto mismo había afirmado alrededor de 250 a. C. el dramaturgo romano Tito Macio Plauto en su obra La comedia de los asnos. Años más tarde dijo Jacques Rousseau que “el hombre nace bueno, pero la sociedad lo corrompe”.
Emperadores romanos como Julio César, Adriano, Trajano, ampliaron las fronteras de su imperio, derrotando a sus vecinos, regresando con ellos atados en largas filas, para ser esclavizados y recibir la ovación de los romanos.
La barbarie consistente en obtener la soberanía sobre las regiones tuvo uno de sus más deplorables episodios con Adolfo Hitler durante la Segunda Guerra Mundial, y hoy día lo revive con Vladimir Putin en su guerra contra Ucrania.
Pero algunos países han evolucionado en décadas recientes hacia la globalización con su nefasta arma, el libre mercado, o libre comercio. La globalización es el proceso que implica la creciente interconexión e interdependenciaentre los países del mundo en aspectos, económicos, políticos, sociales, tecnológicos y culturales.
La globalización permite que los bienes, los servicios, las informaciones y los capitales se muevan por doquiera, promovidos con frecuencia por competencias desleales, como son los elevados subsidios directos e indirectos, por los menores impuestos, por la subfacturación de sus servicios públicos y por sus monedas sobredevaluadas, con el fin de competir exportando a precios con frecuencia inferiores a los de su producción.
La globalización nos ha creado dictaduras con poderosos países invisibles al mando. Curiosamente, casi todo nos circula hoy libremente, salvo la mano de obra. A mediados de los años 70 la industria colombiana participaba aproximadamente con el 25% del PIB, hoy participa con solo cerca del 10%, de acuerdo con Banrepública.
Pero esto no es todo. Poco les importamos a países como Estados Unidos y China, los grandes causantes del Cambio Climático, por ser los generadores del 50% de los gases de efecto invernadero. Les importamos casi exclusivamente como compradores de sus bienes y servicios.
Conclusión. La globalización ha causado. 1. Pérdida de soberanías nacionales. 2. Fuga o relocalización de empresas. 3. Elevado desempleo, origen de migraciones. 4. La desigualdad económica entre naciones. 5. El aumento de la producción industrial ha llevado a una mayor explotación de los recursos naturales y a una aceleración del Cambio Climático. 6. La esclavitud del pasado ha venido evolucionando en décadas recientes hacia la esclavitud comercial moderna.