A diferencia de todas las elecciones anteriores, en esta ocasión existe un riesgo real de perder la libertad. Las propuestas económicas e institucionales del Pacto Histórico sumirían al País en un terreno de inestabilidad que afectaría profundamente la inversión privada y podría echar a la basura todo lo logrado hasta ahora.
Por ejemplo, modificar la composición del Banco de la República, intentar financiar el gasto público con emisión de moneda, expandir como nunca antes el tamaño burocrático del Estado para asumir funciones que a lo largo de los últimos 30 años ha desempeñado correctamente el sector privado oimpulsar una reforma tributaria que asfixie a los grandes capitales implicaría recorrer un camino demasiado riesgoso.
De hecho, tanto en Chile como en Perú, donde en el último año ganaron candidaturas de izquierda radical, se han presentado las mayores fugas de capitales de esos Países. Los inversionistas prefieren llevar su dinero a Naciones que les garanticen estabilidad y no exponerse a padecer las consecuencias de unos programas de gobierno que comparten la misma base ideológica de Petro.
Por eso, en esta ocasión en Colombia no podemos darnos el lujo de caer en divisiones entre centro y derecha, uribismo y santismo, liberales y conservadores o bogotanos y las regiones. Esas peleas, que tuvimos en el pasado, eran viables hace unos años, cuando no existía la amenaza latente de Gustavo Petro, pero hoy en día solo facilitarían la llegada del Pacto Histórico al poder.
Y para forjar esa unión nadie mejor que Fico. Tiene experiencia, fue buen Concejal y Alcalde de Medellín, conoce las problemáticas del País y, sobretodo, no entra en confrontaciones innecesarias. Ha hecho una buena labor agrupando a la mayor cantidad de sectores posibles y eso es lo que necesita Colombia.
Es más, los otros candidatos que piensan que van a ganar a punta de insultos y descalificaciones están equivocados. Por ejemplo, es la hora en que Fajardo no ha entendido que necesita los votos de la derecha para pasar a segunda vuelta y Rodolfo es una incógnita que, por ahora, se desinfló por no haber participado en la coalición.
La carrera presidencial a fondo apenas empieza y el panorama ya se va aclarando. Se vienen dos meses duros de campaña donde Fico deberá continuar la tarea hecha hasta ahora: no encasillarse en extremos, transmitir un mensaje de unión, construir una gran coalición que defienda la libertad y no solamente enfocarse en un discurso anti Petro, sino también proponer soluciones a las problemáticas de las personas.
@Tatacabello
https://www.losirreverentes.com/, Bogotá, 25 de marzo de 2022.