
Juan David Escobar Valencia
Juan David Escobar Valencia
“Lo que yo decía, señor juez, ahí está el detalle, como yo dije, qué casualidad, por un perro que a lo mejor era gato”..., “y ora de que no y que sí y que a lo mejor; ¿y ora, ya llegó?, pues, total, yo creo, ¿no?”..., “claro que llegó, ¿a poco yo iba?, y luego el prestigio profesional, y luego el perro y el gato y el loro, yo ni modo, yo siempre lo he dicho y ahí está el detalle, y luego el toro que ordeñaron, ¿y quién mató?, ¿y no está aquí el verdadero Leonardo?, ¿y no este es inocente y el otro Leonardo también?, y yo ni modo, yo siempre lo he dicho, y ya está, y, claro, ya está el golpe, ¿o no?”..., “ahí está el detalle, señor juez, y estos qué dijeron, porque, total, usted, yo, nosotros y nooo, no, señor, las cosas por su propio peso, la justicia viene para acá, nosotros allá y estos acá; además, usted, viejito, nunca se raja”..., “ay, mira cómo eres, pero ¿y de hoy qué?, ¿verdad que no?, ¿o a qué sí? No tanteada, ahí está el detalle de veras. ¿Pero la identificación? ¿O los dos van siendo Leonardos? ¿Y por qué no lo dijo antes? Porque arreglado aquel desde el principio, porque nosotros, verdad, desde el punto que dijimos, con razón decía que perro, eh, ¿o no?”..., “¿ora sí lo ven? Todo aclarado. Si hablando en cristiano se entiende la gente. ¿O no?”
Juan David Escobar Valencia
Por comodidad, los humanos no entendemos que aceptar sacrificios hoy suele ofrecer mayores beneficios mañana. Por eso solo cuando enfrentamos situaciones como la muerte o la catástrofe entendemos que “una pizca de sudor ahorra un litro de sangre”, como dijo el general George Patton.
Juan David Escobar Valencia
He insistido en que el comunista multimillonario Gustavo Petro es un peligro, no solo por su pasado tenebroso, que en cualquier país decente lo tendría tras las rejas, sino por el futuro aún más nefasto que tendríamos si llega al poder. Dije en otras ocasiones que: “no sabemos si asustarnos más por todo lo que desconoce del tema económico o por lo que él cree saber”; “la verdadera amenaza de Petro no es cuando está borracho. El peligro que él representa para el futuro de este país, especialmente el de los jóvenes, es cuando está ‘sobrio’ y posa del superdotado que, supuestamente, tiene las respuestas a todos los problemas”; “Cuando son analizadas sus ‘geniales soluciones’, se descubre que, por el contrario, serán los pobres quienes más sufrirán las consecuencias de las siempre empobrecedoras y fracasadas ideas comunistas”.
Juan David Escobar Valencia
Los populistas como Petro creen que el ejercicio político es como las versiones fraudulentas de los negocios o plataformas multinivel, conocidas comúnmente como pirámides, en las que para mantener el puesto o ascender hay que mentirles a más personas.
Juan David Escobar Valencia
El conductor del taxi en el que iba hace unos días me dijo que estaba considerando votar por Petro porque, como lo que tenemos hasta ahora no es satisfactorio, lo mejor es “cambiar” y darle la oportunidad a alguien supuestamente “distinto”, como el perverso representante del chavismo colombiano.
Juan David Escobar Valencia
Políticamente, Fajardo y Petro tienen tantas coincidencias que parecen sinónimos: voces distintas, pero de significación idéntica o semejante.
Juan David Escobar Valencia
Que la naturaleza no dio al hombre la inteligencia y pensamiento complejo dados a la mujer, pues qué le vamos a hacer, las cosas son como son. A quienes nos gustan las mujeres, porque ser heterosexual “todavía” no es delito, aceptamos que la belleza quedó mal repartida a favor de ellas y por eso el arte las tiene como protagonistas. Por bella es que la mujer es la única digna de ser llamada como las flores: Rosa, Azucena, Margarita, Dalia, Violeta, etc., y muy especialmente aquella cuyo nombre deriva de los lirios. No vemos a los “ellos” bautizados Gladiolo o Anturio porque esa canallada sería la demostración de que hay niños no deseados al nacer.
Juan David Escobar Valencia
“Cada vez que Petro habla de economía uno no sabe si es que el título de economista estuvo viniendo un tiempo como regalo en las cajas de hojuelas de maíz o en alguna “cajita feliz”. Así mismo, no sabemos si asustarnos más por todo lo que desconoce del tema económico o por lo que él cree saber. Cualquiera de las dos condiciones es pavorosa”.