“Sucedió muy rápido, tan rápido que quizás no lo hayas notado. En los últimos meses, los tres grandes fabricantes de automóviles de Estados Unidos: Ford, General Motors y Stellantis, la compañía de nombre extraño propietaria de Dodge, Chrysler y Jeep, se han metido en grandes problemas”.
“Hace aproximadamente una década, Estados Unidos rescató a los Tres Grandes y juró que no volvería a hacerlo. Pero el gobierno federal tendrá muy pronto que volver a ayudar a los Tres Grandes y al resto del mercado automovilístico estadounidense. Y tiene que hacerlo de la manera correcta y ahora mismo para evitar el próximo rescate automotor”.
“La mayor amenaza para los Tres Grandes proviene de una nueva generación de fabricantes de automóviles chinos, especialmente BYD, que se especializan en producir vehículos híbridos enchufables y totalmente eléctricos. El crecimiento de BYD es asombroso: vendió tres millones de vehículos electrificados el año pasado, más que cualquier otra empresa, y ahora tiene suficiente capacidad de producción en China para fabricar cuatro millones de automóviles al año”.
“Pero eso no es suficiente: está construyendo fábricas en Brasil, Tailandia, Hungría y Uzbekistán para producir aún más automóviles y pronto podría agregarle a esta lista a Indonesia y México. Se avecina una avalancha de vehículos eléctricos”.
“Los autos de BYD brindan un gran valor a precios que superan a cualquier producto de Occidente. Este mes, presentó BYD un híbrido enchufable que ofrece una autonomía totalmente eléctrica y se venderá por poco más de 11.000 dólares. ¿Cómo pueden hacer esto? Al igual que otros fabricantes chinos, BYD se beneficia y se beneficiará de los bajos costos laborales del país productor”.
“Pero esto explica sólo parte de su éxito. El hecho es que BYD y otros fabricantes de automóviles chinos como Geely, propietario de las marcas Volvo Cars y Polestar, destacados fabricantes, han aprovechado el progreso de China en la industria de las baterías y en las líneas de producción automatizadas para crear un gigante”.
Precios de algunos BYD en México. BYD D0phin Mini EV US$ 23.000. BYD Dolphin 2024 US$ 32.300. BYD Tang EV 2024 US$ 84.200, el más costoso.
“Ford y GM planearon una ambiciosa transición a los vehículos eléctricos hace tres años, pero no tardaron en tropezar. El año pasado, Ford perdió más de 64.000 dólares por cada vehículo eléctrico que vendió. Desde octubre, ha retrasado Ford la apertura de una de sus nuevas plantas de baterías para vehículos eléctricos. Y GM fracasó en el inicio de su nueva planta de baterías Ultium, concebidas como la base de todos sus futuros vehículos eléctricos”. Pasa a la página siguiente.
“Ford y GM sí han logrado algunas victorias aquí, en Estados Unidos, por medio del Mustang Mach-E y el Chevrolet Bolt, ambos éxitos modestos, mas no están compitiendo al nivel de Tesla y Hyundai, compañías cuyas fábricas operan en sitios menos favorables a los sindicatos localizados en el Cinturón del Sol”.
El 14 de mayo de 2024, escuché la noticia a continuación y la consulté con la IA de Microsoft, Bing, y me respondieron: “La administración de Biden acaba de imponerles elevados aranceles a los vehículos eléctricos importados desde China, en especial, a los de la marca BYD. El arancel establecido es del 102,5%. Esta medida busca proteger a los fabricantes estadounidenses y se alinea con la política de incentivar la producción de vehículos eléctricos con baterías dentro de su país”. ¿Algo digno de imitar, presidente Petro?