Columnistas Nacionales
Eduardo Mackenzie*
En la batalla política que existe hoy entre Colombia y el desastroso presidente de turno, el lenguaje, los discursos, los aspavientos, las amenazas, los textos mal ortografiados de Gustavo Petro son armas de combate cultural y psicológico que él utiliza cada día con relativo éxito contra la ciudadanía.
César Salas Pérez
Bastante lamentable resulta comprender que por obra y gracia del actual gobierno, Colombia es oficialmente, un Estado insurgente y peor aún, un Estado fallido, debido, precisamente, a su claudicación ante la insurgencia de la cual el presidente Petro nunca se desligó, a su vez, al avance sin precedentes en la desinstitucionalización en procura de formar el caos social, la desconfianza ciudadana y el miedo de la gente a caer en una guerra civil premeditada por Petro y auspiciada por su patrón, el dictador Maduro.
Luis Guillermo Vélez
El verdadero académico es modesto y alejado de la ostentación y jamás se sometería al grotesco espectáculo que ofrecen sin pudor algunos de los actuales aspirantes.
Álvaro Ramírez G.
La avalancha de reveses que viene sufriendo el gobierno Petro, lo tiene sumido en la desesperación.
José Alvear Sanín
Hace años se me quedó empezado El loro de Flaubert, agradable relato de Julian Barnes (1946), quien, con más de una docena de novelas, ocupa importante lugar en la nueva narrativa británica. Sin mayor interés en su producción ojeé su Inglaterra. Inglaterra (Barcelona: Anagrama, 1999), y cuando vi que allí aparecía la isla de Wight no pude resistir la tentación y me llevé el libro.
Carlos Salas Silva
“Estoy viejo, enfermo, cansado, desengañado, afligido, calumniado y mal pagado. Créanme que nunca he mirado con buenos ojos los levantamientos y que durante estos últimos días me he arrepentido hasta de los que emprendimos contra los españoles”. Simón Bolívar