Otras opiniones
Mauricio Botero C.
El Acuerdo de Paz de La Habana, con solo una parte de uno solo de los actores involucrados en el conflicto, terminó siendo negociado a las barreras (perdón, a las carreras) por un saltimbanqui oportunista, como lo llamaba Antonio Caballero. Los analistas de los conflictos colombianos aceptan que la gasolina que ha alimentado los conflictos en Colombia en los últimos 50 años ha sido el narcotráfico. Hoy, cerca del 40 a 60 % de las Farc se mantienen activas traficando coca y amapola, porque el equipo negociador en La Habana no fue capaz de obligar a la guerrilla a confesar rutas, laboratorios, cómplices y apoyos al narcotráfico desde Venezuela. El gobierno anterior, al contemporizar con el vertiginoso aumento el área sembrada en coca para no incomodar a las Farc, dejó abierta al máximo la llave de la gasolina del conflicto.
Mario González
Aún antes del inicio formal de las campañas electorales del próximo año, el escenario artificial que se quiso construir se empezó a derrumbar estrepitosamente. La pretensión de hacer del denominado centro, de coordenadas y contenidos imprecisos, la congregación de los profetas del futuro no resistió los afanes, egos y ambiciones de sus diversos componentes, ni pudo, a pesar de sus malabares y artimañas, encasillar a los colombianos en un escenario de repudiables extremos y una nueva y redentora equidistancia.
Sofy Casas
Hoy más que nunca comienza a cobrar vida el famoso acuerdo sobre lo fundamental de uno de los más grandes estadistas e influyente voz de los últimos tiempos en nuestro país, Álvaro Gómez Hurtado, de la mano de uno de los precandidatos presidenciales con una gran trayectoria política, el empresario y economista Óscar Iván Zuluaga.
Enrique Cabrales
Durante meses hemos venido evidenciando cómo el hampa y la criminalidad han devorado las entrañas de la ciudad, convirtiendo las calles y principales vías en escenarios de tragedia, zozobra y peligro.
Diego Mesa
Una gran oportunidad para aprovechar aún más el potencial eólico y solar que tiene Colombia.
Juan Manuel Charry
Quien concibe la sociedad como guerra de clases, la democracia donde no todos somos iguales, y solo su propuesta nos salva del caos y el abismo, es un socialista y un mesiánico.