Dentro de tres semanas Colombia saldrá masivamente a tomar una decisión que podría marcar nuestro rumbo como nación.

Se tratará no solo de elegir un presidente, sino un equipo de gobierno y un modelo político que durante cuatro años tendrá el control de las Fuerzas Militares, dirigirá nuestra economía e instalará una forma de gobernar que veremos todos los días en acción a través de los medios de comunicación, las redes sociales y las calles del país.

Nos jugamos el futuro no solo del país, sino de nuestras familias, hijos y amigos.

Y hoy, a pocos días, básicamente hay dos opciones: la que representa Fico, que en una campaña maratónica y en poco tiempo, empieza a devolverle la esperanza al país, o la que representa Petro, que después de 30 años de vivir del Estado y de llevar 12 años perdiendo campaña tras campaña, lo está intentado por tercera vez.

No podemos desconocer que ese Pacto, liderado por una persona que fue formada en grupo armado ilegal, que realizó secuestros, masacres, tomas como la del Palacio de Justicia y mató soldados, policías y civiles, hoy tienen más opciones que hace 4 años. Y aunque la vida puede brindar segundas oportunidades, los hechos que han ocurrido en esta campaña, demuestran que, aunque que Petro entregó las armas, su modo de pensar, actuar y proceder no se desmovilizó.

Y lo sucedido en las últimas semanas, confirman esto. Y peor aún, que no solo es él, sino todos los que lo rodean y que podrían ser nuestros próximos ministros, proceden de la misma manera: negocian con delincuentes, manipulan la información, persiguen a la prensa, atacan a los que piensan diferente, o como lo confesó esta semana, el abogado de Petro, Miguel Del Río, infiltran las campañas opositoras.

Y si así son luchando por el poder, ¿se imaginan con el control de todo?

El país está a tiempo de elegir. Vienen las semanas más difíciles donde la gente empieza a tomar la decisión por quién votar y los que creemos en que el país debe cambiar para bien y no para mal, tenemos que ser fuertes, mantenernos unidos y estar activos en redes, medios y multiplicando con nuestras familias y amigos al peligro que nos enfrentamos. 

Son pocos días, pero cruciales, que determinarán nuestros próximos años.

Hoy más que nunca nos la tenemos que jugar las 24 horas del día para exponer el riesgo al que estamos expuestos, porque si no actuamos ahora, el futuro de nuestra nación quedará en manos de Petro, el patrón del mal.

@jarizabaletaf

https://www.losirreverentes.com/, Bogotá, 07 de mayo de 2022.