Por tanto, Colombia, como uno de los países bioceánicos del mundo, está liderando el debate y el análisis nacional y mundial para entender los océanos, no solo como un activo estratégico, sino también como un elemento fundamental para la prolongación de la vida.
Como país, hemos puesto el foco en la economía azul y nos hemos planteado la meta de convertir a Colombia en Potencia Biocéanica 2030, como quedó consagrado en el documento CONPES 3990, expedido durante nuestro Gobierno. Desde la Comisión Colombiana del Océano – CCO, que tengo el honor de liderar, hemos impulsado el desarrollo de la industria marítima, el turismo y la generación de empleo. En ese sentido, logramos la aprobación de la Ley de Abanderamiento, la certificación ‘Blue Flag’ en 4 playas, adelantamos la Expedición Seaflower Plus, 8 expediciones más y creamos la Red Colombiana de Semilleros, entre otras acciones que nos han permitido fortalecer cimientos para aprovechar nuestras dos enormes ventanas al mundo, pero también proteger nuestro patrimonio ambiental.
En el marco de este trabajo transversal que hemos adelantado, organizamos el Foro Internacional de Países Bioceánicos, que reunirá a autoridades marítimas del mundo y que se cumplirá el próximo 23 de marzo, en una de nuestras ciudades emblemáticas: Cartagena. En este espacio, compartiremos experiencias en desarrollo económico sostenible y uniremos esfuerzos para la protección y el aprovechamiento integral de nuestros recursos marino-costeros.
Entre nuestros invitados de lujo estarán Mathias Cormann, secretario General de la OCDE; Inger Angersen, directora Ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente - PNUMA; Kitack Lim, secretario General de la Organización Marítima Internacional; César Landa, ministro de Relaciones Exteriores de Perú; entre otros.
Como humanidad, debemos entender que nos convoca un gran compromiso con el futuro, que debe comenzar por garantizar la preservación de la vida, en todas sus manifestaciones. Si somos capaces de aprovechar el potencial marino en ciencia, comercio, cultura y ecología, podremos no solo garantizar un mañana para los que nos preceden, sino también, que ese mañana llegue con nuevas posibilidades de crecimiento, empleo, progreso y justicia social.
Indudablemente, espacios como el Foro Bioceánico nos dan la oportunidad para tender puentes, avanzar en cooperación, hacer que nos conozcamos mejor como países oceánicos e identifiquemos de manera asertiva, los ejes estratégicos hacia nuestro propósito de un futuro azul para el planeta. ¡Hablar de los océanos es hablar de esperanza!
*Vicepresidente y canciller.
https://www.eluniversal.com.co/, Cartagena, 22 de marzo de 2022.