Columnistas Nacionales
Saúl Hernández B.
La Iglesia de Cristo depositó su voto por un ateo que hace profesión de fe cada cuatro años hincado en las basílicas de pueblo. Ahora tiene la bendición papal.
Margarita Restrepo
La situación de Medellín es trágica. La administración de Daniel Quintero Calle ha llevado a nuestra ciudad hacia el abismo social y económico.
Juan David Escobar Valencia
Aunque el número exacto es difícil de estimar, no me equivoco si digo que más de ciento sesenta países en el mundo dicen tener un régimen democrático, que no significa solamente tener elecciones periódicas, pues todos los días una democracia es más lo que pasa antes y después de ellas, y por eso Venezuela, Cuba y Nicaragua son dictaduras perfumadas de democracia.
Ariel Peña
De manera ramplona Gustavo Bolívar, un idiota útil del comunismo, publicó un foto-montaje de la visita que hizo el candidato marxista Gustavo Petro al papa Francisco en la Santa Sede, a sabiendas de que el encuentro fue privado y no hubo ninguna foto ni declaración oficial; sin embargo el montaje se hizo de un encuentro de Vladimir Putin con el papa, que se efectuó en Julio de 2019 y se le cambio el rostro del ruso por el del candidato del Pacto Histórico, comenzando a aparecer en redes sociales dicho fraude, el cual no admite excusas.
Hernán González R.
Considero que los tratados comerciales de Colombia pueden y deben revisarse. Mi propuesta no implica cerrar la economía colombiana al mundo. No se trata de instalar una economía soberana, aislacionista, ni de renunciar a los acuerdos multilaterales. Se trata de reconocer que Colombia es una economía muy pequeña que requiere de los productos de los países ricos para desarrollarse y para sobrevivir. Exportamos hoy, en especial, materias primas como el petróleo para que otros países se industrialicen con ellas. Apremia diversificar nuestra economía para exportar con valor agregado.
Eduardo Mackenzie
Gustavo Petro aprovechó su viaje de auto bombo a España para hablar mal de su país e insultar a los colombianos que se oponen a sus ambiciones. En un encuentro con el diario El Mundo, de Madrid (1), declamó una vez más su odio por Colombia, por su gente y su modo de vida. Mostró que él perdió toda decencia patriótica y que carece de escrúpulos al momento de describir lo que él cree que es nuestro país. En Colombia, dice, “se ha construido una especie de proyecto político y económico sobre la violencia y el miedo”. El hecho de que las instituciones y las políticas hayan sido refrendadas por el sufragio universal desde hace 168 años lo tiene sin cuidado. Lo que los colombianos hemos construido, cree él, es un error desde el comienzo. Petro estima que no hay nada que valga la pena.
