En buena hora el señor Gobernador, Andrés Julián Rendón y el señor Alcalde, Federico Gutiérrez, con el sector privado han hecho esta convocatoria y en el día apropiado. Hoy hace 205 años, un General nacido en Caracas, nos dio la libertad a esta tierra colombiana y desde aquí, la logró para su Patria y para los otros países. Ese ejército que cruzó los Andes, que sufrió tanto la adversidad del clima, la falta de vestuario, el hambre, ese ejército nos dio la libertad. No puede ser que el ejército venezolano de hoy, apoye la tiranía y no reconozca el camino de la libertad que ha ganado el Bravo Pueblo.

¡Qué esfuerzos por aquella independencia y qué esfuerzos los de María Corina!

Quienes hemos seguido este proceso tantos años cuando en el continente se aplaudía tanto al chavismo y a nosotros nos preocupaba que empezaban a destruir la democracia, la libertad, el emprendimiento, la cohesión social, una mujer casi adolescente, en Venezuela, era una voz aislada de oposición. Todavía registran las redes aquel discurso que ella le dirigió al Presidente Chávez de oposición, con argumentos muy fuertes cuando el Presidente había hablado largo rato en el Congreso.

María Corina ha recorrido su Patria por tierra, por ríos, la dictadura no permite que las empresas aéreas la transporten, la han hospedado sus compatriotas porque la dictadura persigue a los hoteles que la alojen. Sus compatriotas cuando le dan hospedaje, se exponen a todas las persecuciones de la dictadura.

María Corina, en este recorrido, logró en octubre del año pasado ese gran apoyo de todo el pueblo de Venezuela y empecemos por esto:

Que no nos venga a decir la comunidad internacional que allá hay una polarización. A llá hay una polarización de la inmensa mayoría popular contra la dictadura de Maduro. Pero,y esto es muy importante para las decisiones que quiera tomar la comunidad internacional, que no nos vengan con ese cuento de negociac iones, la democracia no se negocia.

María Corina no solamente ganó esas primarias de la oposición si no que se resignó a no poder ser candidata por las imposiciones de la dictadura. Escogió para que la reemplazara una gran mujer, a la Ora Corina Yoris. Tampoco le permitieron ser candidata y María Corina prefiriendo el amor por el pueblo, que la rabia que generaría el dolor, escogió a un hombre prudente, de serena firmeza, al diplomático Edmundo González, para que fuera candidato. El discurso de ambos, cómo ha sabido defender la democracia. Ellos enfrentaron la dictadura, pero no al pueblo venezolano. Por eso, millones de venezolanos que durante años apoyaron al chavismo, ahora han apoyado a Edmundo y a María Corina, porque ellos con gran talento, y esto da mucho ejemplo para Colombia, unieron la base popular de Venezuela, la tradicional oposición y las mayorías que en algún momento apoyaron a Chávez y a Maduro.

El discurso de María Corina es ejemplar, esa firmeza en la defensa de la democracia, ese designio de "hasta el final", pero la sensibilidad, el corazón… Cuando uno encuentra en estos lugares y en tantos de la Patria colombiana, los venezolanos que le narran: "Mi hijo torturado en la cárcel", "Mi familia dividida", "Mis padres esperando en Venezuela que les hagamos una transferencia de algunos recursos", uno comprende el talento del discurso del corazón de María Corina, llamando a la recuperación de la democracia, de la libertad, a la unión de las familias.

Allá, acabaron con la libertad y con la independencia de las instituciones. Desde esta plaza tan importante de Medellín, ante esta audiencia del Bravo Pueblo que vive aquí, que está fundido con nosotros en afecto y en solidaridad, yo también le quiero preguntar a la justicia de Venezuela: ¿Van a seguir condenando a los políticos de oposición? Permitieron con sus condenas que el régimen torturara a Leopoldo López y a Lorent Saleh. Eso no lo debe hacer una justicia democrática. La justicia de Venezuela tiene que proteger la libertad, tiene que hacer un alto en el camino. Encontré una señora llorando porque le habían puesto preso a su hijo y lo tenían torturado. Esa no puede ser la actitud de una justicia en un país que añora la libertad, que quiere reencontrarse con la democracia.

El llamado al Ejército de Venezuela, aquel que hace 205 años nos dio la libertad, desde el cielo no estará contento de que el Ejército de Venezuela de hoy le ayude a la dictadura a oprimir al pueblo que ansía la libertad.

El Libertador decía que aquello que más rabia genera en el pueblo es la indulgencia de los tribunales con aquellos que quieren la esclavitud. Ojalá esas frases del discurso que envió al Congreso de Angostura llegaran a los oídos de los jueces de Venezuela, para que la justicia venezolana se rebele y haga justicia y no siga de apéndice de la dictadura.

Me decía un interlocutor que esto se tiene que definir de esta fecha a enero, cuando Maduro quisiera posesionarse. Esto se tiene que definir rápido. Esto quedó definido en las urnas, ahora lo que hay que hacer es honrar la decisión popular.

Chávez decía que nada pasaba con acabarles la libertad, que la consideraba burguesa, que nada pasaba con acabar la empresa privada, que tenían petróleo. La corrupción y el mal manejo también han reducido la producción de petróleo y al pueblo venezolano, que lo engañaron con unos altos subsidios durante años, después lo llevaron a la más alta pobreza. La corrupción, el derroche, la persecución a la empresa privada, al emprendimiento individual y, pensemos en esto, dejó a la dictadura sin recursos para poder mantener la financiación de los subsidios. Hoy lo único que tiene la dictadura es un vozarrón desafiante y un fusil contra el pueblo.

Pero, el Bravo Pueblo no está improvisando. Ustedes, inmensamente jóvenes, no muchos tendrán que recordar, como yo, que el Bravo Pueblo ha sabido tumbar los dictadores. En 1957, cuando aquí se hacía el referendo del Frente Nacional para superar la violencia entre los partidos, el dictador de entonces de Venezuela hizo un plebiscito para mantenerse en el poder: Marcos Pérez Jiménez. Y el pueblo no contento con la manera como se robaba la democracia, presionó para que saliera del poder, y ese robo él lo pudo disfrutar muy poco tiempo. El pueblo de Venezuela sabe salir de los dictadores.

María Corina con mucho valor civil hace algún tiempo dijo que la solución de Venezuela es de los venezolanos, y es el pueblo venezolano el que ha logrado esta gran victoria que hoy reclama. Pero la comunidad internacional no los puede abandonar. La comunidad internacional tiene que cerrar filas, sin dudas, para decirle: Maduro, ¡basta ya!

Con una dictadura que se ha robado la libertad y se ha robado el derecho de los venezolanos a expresarse en las urnas, no hay negociación, hay que tener la fortaleza para sacar esa dictadura y eso es un deber de la comunidad internacional. Ellos creyeron en el consejo que le dio Castro a Chávez, cuando le dijo: "Haga elecciones mientras usted las pueda manejar." Y como siempre las manejaban y se las robaban, creyeron que ahora se las iban a robar impunemente.

María Corina, toda esa militancia democrática del Bravo Pueblo, nos dio un ejemplo: cómo se organizaron en todo el país. Nadie de observadores internacionales, había sido capaz de detectar el fraude en el pasado. Ese fraude que intentaron hacer ahora, para ejemplo al mundo y nosotros, la organización de María Corina, de Edmundo y del Bravo Pueblo.

La dictadura creyó que iban a seguir manipulando el resultado electoral y se encontraron con una pared, con la fuerza de una mujer, de su corazón, de un pueblo que le tiene todo el afecto, de un candidato escogido por ella que está de acuerdo con la necesidad del momento, que es unir y seguir uniendo a la base popular de Venezuela y han salido adelante, le han demostrado con números y con las actas electorales oportunas, que la dictadura no está en posibilidades de seguir manejando, torciendo el resultado electoral, como les había indicado Castro y lo practicaron Chávez y Maduro.

¿Qué pensará el ejército de Venezuela torturando a las mujeres, a los hombres libres?, cuando hace 205 años, un ejército que había formado Páez en los Llanos, en lo que es hoy Ciudad Bolívar, Angostura y Santander en Tame, de venezolanos y colombianos, nos dio la libertad. No puede ser que este ejército le siga negando la libertad al pueblo venezolano que la ha ganado en las urnas.

¡Qué viva Venezuela!

¡Qué viva Colombia!

¡Qué viva María Corina!

¡Qué viva Edmundo!

¡Qué viva el Bravo Pueblo!

Al señor Gobernador, al Alcalde, al sector privado, a todos ustedes, muchas gracias. Día de reflexiones.

* Intervención en la Gran Concentración en Defensa de la Democracia en Venezuela - Medellín, 7 de agosto de 2024.