Como decía el Dr. Darío Echandía en mi época, “es que la gente no es pendeja”; por eso se ha planteado una actividad pacífica, sin daños, sin atacar la propiedad privada ni la pública, sin destrucción de la infraestructura como lo demostraron esta semana los cientos de miles de marchantes en protesta contundente contra los desafueros presidenciales, las reformas a la brava, la ineficiencia gubernamental, la incoherencia de las informaciones, la demora en la aplicación de las sanciones incuestionables, el irrespeto a las leyes y a la Constitución y la incapacidad de altos funcionarios que fuera de su actividad ideológica son abiertamente incompetentes.
Nada le valdrá al señor Petro tatar de desvirtuar la asistencia a las marchas del domingo que estimó en 250.000 personas, número superado con creces solo en Medellín, en ellas a nadie se le pagó la asistencia, no hubo refrigerios ni transporte para su traslado, la gran mayoría compró banderas y elaboró pancartas con dineros de su bolsillo; no fueron los partidos de oposición los que marcharon, lo hizo mucha gente sin partido, los petristas arrepentidos de sus desafueros, los jóvenes frustrados del “cambio”, pero en reversa, de manera presidente que usted solo se cree lo que imagina y, lo destruye, ignorar lo que la gente piensa. ¿Este domingo le quedó claro? Escuche a la Sarabia, la única de su gobierno que entendió.
No creo que se escape del Juicio Político, a los políticos de tienda también los castigó la marcha, ya todos sabemos a quienes no queremos en el congreso, si la Comisión de Acusaciones no funciona se buscará sin descanso aplicarle con rigurosidad la ley que los obliga a cumplir sus compromisos y quienes han vendido su alma al diablo simplemente pararán donde les corresponde, en el infierno. Y, si la ley no los juzga como es debido, no escaparán a la justicia divina por traicionar a la patria.
El Rincón de Dios
“Nadie fabrica candados sin llaves. Asimismo, Dios no da problemas sin solución.” Anónimo