Petro no podía ser inferior al gringo, le ofrece a su homólogo suministrarle energía limpia proveniente de la eólica de la Guajira que, por la consulta obligada a la comunidad Wuayú, experta en poner palos a la rueda, ha impedido construir las líneas de transmisión para el suministro de energía a nuestra patria, creyendo que, para exportarla, le darán el discutido aval. No para allí la genialidad, dice que importará materia prima para aliviar el precio de la gasolina en Colombia, metáfora empleada para no decir petróleo ya que el nuestro contamina, pero el venezolano mucho más pesado y que necesita refinerías especiales, es inocuo para nuestro medio ambiente y el del mundo que lidera salvar.
No sé si a este viaje lo acompañó Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, uno de los CEO más destacados de América, en menos de un año logró que las utilidades inmensas de esta compañía estrella logradas por el “inepto” Felipe Bayón, consiguió que estas cayeran en un 46%, parecido al ministro de hacienda que después de que el gobierno de Duque entregó el PIB en un 12% hoy, orgullosamente, está en menos el 0,3% y no ha logrado bajar una inflación de dos dígitos, pese a los altos intereses del Banco de la República y propone modificar la regla fiscal que llevará la economía al caos inusitado.
El sombrero de mago de Roa es llamativo, dice Benedetti, exembajador que estaba oculto, que por este pasaron quince mil millones de pesos que Roa logró desaparecer de la contabilidad de la campaña presidencial para no caer en excesos. Como las bolsas plásticas también son contaminantes, otra plata que desapareció una niñera, en el rifirrafe entre Benedetti y la Sarabia en medio de una combinación alcohólica con perico -no sean mal pensados perico es café con leche- aparece que el dinero ya no se movía en empaques baratos sino en maletas Samsonite como se deduce de la muerte de un coronel “suicida” que sabía los detalles.
Hay otros genios por ahí, Iván Danilo Rueda, Comisionado de paz, y el ministro de defensa gestores de la maravillosa Paz Total que “Antonio García”, comandante del ELN e “Iván Mordisco” de las “disidencias de las FARC” y tocayo de Rueda, manejan con asombrosa maestría y pobreza ya que, las casi 250.000 hectáreas de coca, extorción y secuestro los llevan al lamentable estado de la pobre viejecita sin nadita que comer, lo que obligará al Estado a darles un generoso subsidio para “dejar de delinquir”.
El Rincón de Dios
“Cuando la política pretende hacer la obra de Dios, pasa a ser, no divina, sino demoníaca”. Benedicto XVI