Hoy estamos ante un símbolo de la libertad; eso es Plinio, un liberal puro, en la más amplia acepción filosófica. Su guía ha sido la libertad y la protección que a ella debe el Estado de Derecho.

La libertad en Plinio está en su ADN, en su vasta cultura, en el análisis crítico de sus conocidos, en sus vivencias socialistas y en la observación del mundo libre.

Muy joven escuchó los disparos que cegaron la vida de Jorge Eliécer Gaitán. Su padre, Plinio Mendoza Neira, gran amigo del líder, caminaba con él en el momento del asesinato. Quedaría la curiosidad de saber qué análisis de las propuestas de Gaitán haría Plinio más allá de la admiración y el cariño que los unió. Podría ocurrir lo que nos ha sucedido a muchos colombianos, un superior respeto por el líder y una diferencia silenciosa con las ideas que expuso en su época.

Otro episodio bien significativo y paradójico es su amistad con el Padre guerrillero Camilo Torres Restrepo y el contraste con su radical oposición a la guerrilla. Podría suponerse que en su mente la lucha armada solamente cabría para derrotar dictaduras y restablecer libertades, nunca para imponer una dictadura comunista.

Plinio pronto se decepcionó de regímenes comunistas como el Cubano que cautivaron a tantos de su generación con la propuesta inicial de equidad social en democracia.

La entrañable amistad con el maestro Gabriel García Márquez también sirvió para que Plinio le pidiera acudir a su cercanía con Castro para salvar la vida de disidentes, periodistas e intelectuales cubanos condenados al paredón, de lo cual pocos se salvaron.

Plinio posee una vasta cultura, su mente ha sido una biblioteca enorme; prenda valiosa que como el verdadero sabio ha llevado sin ostentación.

La generosidad, hermana del humanismo, y ambas compañeras del espíritu libertario, han sido naturales y abundantes en la vida de Plinio. Nadie como él gozó con la entrega del Nobel de Literatura a García Márquez, nadie como él ansiaba con desespero que ese Nobel también lo recibiera Vargas Llosa.

Plinio, Vargas Llosa y Montaner, quien acaba de fallecer, han sido tres luminarias de la libertad en los momentos de mayores seducciones totalitarias.

La pluma de Plinio ha sido la espada más valerosa en el combate a los dos principales enemigos de la libertad: el crimen y el estado todopoderoso.

Los integrantes de las Fuerzas Armadas de Colombia, cada soldado, cada policía, han sentido en Plinio la defensa sin claudicaciones de la institución castrense. Los ha defendido contra toda injusticia y anticipó esa acción letal del crimen contra la democracia que es la "Guerra Judicial", como él la denominó.

En la frase del Presidente Reagan, del espíritu libertario de Plinio podemos decir que su batalla contra el estado gigante deriva de entender que la "contracción del Estado equivale en la misma proporción a la ampliación de la libertad del individuo y del bienestar de la sociedad".

Un grande ejemplo suyo ha sido la transparencia, aquella condición para sentirse libre, sin complejos, sin ataduras.

Mi presencia aquí tiene además un significado que no puedo ocultar: la gratitud que comparto con los míos por el gran patriota y el noble amigo.”

* Palabras del expresidente en el homenaje del Centro Democrático a Plinio Apuleyo Mendoza.

Bogotá, agosto 16 de 2023