Sin embargo, la transformación más visionaria es la que se ha venido gestando en los últimos cuatro años, bajo el liderazgo de la actual junta y comité directivo, y apalancada en las políticas del gobierno Duque. La estrategia al 2040, “Energía que transforma”, tiene dos pilares fundamentales. El primero es crecer con la transición energética, diversificando sus líneas de negocio, al tiempo que maximiza el valor de sus reservas. Ecopetrol entendió la transición energética como una política de Estado y se convirtió en el primer autogenerador solar del país, además de estructurar proyectos eólicos y geotérmicos. En 2021, Ecopetrol adquirió el 51 % de ISA, incursionando en transmisión eléctrica, un segmento crítico en la transición energética que le asegura ingresos estables y crecientes. Todo esto lo ha logrado sin descuidar su negocio principal, incorporando dos barriles de reservas probadas por barril producido en 2021, anunciando descubrimientos de gas en el caribe e incrementando la producción de yacimientos no convencionales en Texas y Delaware, como antesala para desarrollar el fracking de manera segura en Colombia. El segundo pilar es la sosTECnibilidad, acelerando la descarbonización y la eficiencia energética. En marzo de 2022, Ecopetrol puso en operación el primer piloto de hidrógeno verde en Colombia, y actualmente desarrolla soluciones naturales del clima y proyectos de captura, almacenamiento y uso de carbono, lo cual le permitirá alcanzar la neutralidad de carbono y agua en 2050.
Esta estrategia, que sitúa a la empresa como líder en la transición energética a nivel internacional, también se refleja en los estados financieros. En 2021, Ecopetrol obtuvo una utilidad neta de $ 16,7 billones, la más alta de su historia, consistente con el crecimiento del 10,6 % del PIB nacional. En el segundo trimestre de 2022, Ecopetrol volvió a batir récords, al igual que la economía colombiana, que creció al 12,6 %, y solo en los primeros seis meses del año superó la utilidad de todo el 2021.
Desafortunadamente, estos logros y la gran proyección que tiene Ecopetrol para los próximos 20 años se pueden poner en riesgo por cambios abruptos en la política sectorial, como lo evidenció la preocupante rebaja en la calificación crediticia individual por Moody’s, así como cambios en los órganos de administración y decisión de la compañía. Por eso es obligación de todos defender nuestro mayor patrimonio y exigirle al nuevo gobierno responsabilidad con el sector y respeto por la independencia, el gobierno corporativo y la visión estratégica de la empresa
http://www.elblogdemontaner.com/, Medellín, 18 de agosto de 2022.