Columnistas Regionales
Luís A. Colmenares
La gasolina y el diésel no solo son combustibles de los vehículos automotores, sino que también son combustibles de la economía, en la medida en que cualquier cosa que le pase a la gasolina y al diésel se convierte en un efecto multiplicador para toda la economía, por consecuencia de los efectos que también tienen en la sociedad en general. Y no es un problema exclusivo de Colombia.
Cuando se aumenta el precio de los combustibles también se aumenta el precio de todo, pero especialmente el precio de los alimentos. Además, ese aumento tiene efecto en el combustible que utiliza el parque automotor de las entidades del gobierno nacional y los gobiernos territoriales, que no es pequeño, y se paga con el recaudo de nuestros impuestos.
Jorge Enrique Pava
A un mes cumplido del nuevo gobierno nacional, la desesperanza no puede ser mayor. Lo que vemos es improvisación, desconocimiento de la realidad, atropellos a la razón, asaltos a la propiedad privada, intentos de expropiaciones, lenidad con los criminales y complacencia con la delincuencia. Vemos un país en caos, con riesgo de fracasar a muy corto plazo, y el asomo inminente de la mayor inseguridad jurídica y económica en nuestra historia. Y lo que dicen es que “heredaron un país en ruinas”, y que la culpa es de los partidos que históricamente han ejercido el poder en Colombia.
Hernán González R.
La prestigiosa revista TIME publicó el 22 de julio pasado un bien documentado e inquietante artículo titulado: Air conditioning will not save us. Autor: Eric Dean Wilson, del cual reproduzco unos cuantos párrafos a continuación:
Luís A. Colmenares
Nadie duda de la importancia que tiene recuperar el Estado para la gente y fortalecerlo para que en efecto cumpla con los fines y finalidades que están previstos en la Constitución, sobre todo para sacarlo del lugar al que lo han llevado los privilegios, la politiquería y la corrupción.
Jorge Enrique Pava
Sinceramente pensaba que la administración Marín solo iba a representar cuatro años perdidos para la ciudad y que se recordaría como la más inútil, corrupta e inepta en la vida de Manizales. Estaba convencido, además, de que el letargo en que nos encontrábamos los manizaleños nos había condenado a seguir en manos de gobernantes perversos que, gracias al constreñimiento que bien saben cometer los actuales, y al derroche de mermelada y dádivas, tenían garantizada su perpetuidad en el poder.
Jorge Enrique Pava
Definitivamente el caso de “Las Marionetas” está generando un revuelo de magnitudes desproporcionadas en Caldas y la región. Y no es para menos, pues el cúmulo de personas e instituciones que han salido salpicadas por estar relacionadas con hechos delictivos o, simplemente, por haber sido mencionadas en una conversación o ejercer el libre derecho al trabajo, como en el caso de algunos contratistas, tiende a crecer cada día.