Facebook

     SiteLock

Última hora
Los paragestores de paz - Miércoles, 20 Noviembre 2024 04:06
Intervención Foro Cd sobre energía - Miércoles, 20 Noviembre 2024 04:04
Petro va por CC y Registraduría - Miércoles, 20 Noviembre 2024 04:02
La idea de “justicia” de Petro - Miércoles, 20 Noviembre 2024 04:01
Gobierno necesita aprender mucho - Miércoles, 20 Noviembre 2024 03:34

Ariel Peña               

En un triunfo electoral para la Presidencia de la República del marxista Gustavo Petro, de acuerdo con los partidos y grupos que lo acompañan en el Pacto Histórico que son seguidores del comunismo, indefectiblemente a Colombia le espera la condenación al peor escarnio que le puede ocurrir a una nación, cuando cae en las garras del totalitarismo; de modo que se avecinan tiempos aciagos, en donde la fuerza bruta se ensañara en contra de las personas y organizaciones que no compartan los postulados del régimen;  en mayor escala a lo ocurrido hace un año al amparo del Paro Nacional, que fue aprovechado por las fuerzas extremistas para amedrentar y humillar a la población, tomando de base a  la violencia marxista.          

El próximo 5 de mayo se cumplen 204 años del natalicio del señor Karl Marx, que ocurrió  en  Tréveris-Alemania;  a dicho personaje la mamertería lo  sigue considerándolo como un coloso, pero   la aplicación práctica de sus dogmas lo único que le han  aportado de importancia a la humanidad es una cifra cercana a  150 millones de asesinatos, convirtiéndose el marxismo en una secta  genocida y burocrática, cuyos integrantes principalmente las élites se creen predestinados, no se sabe por cuál deidad, para someter a sus instintos perversos a los demás mortales; debe de ser  por los dogmas del materialismo histórico y la inevitabilidad(como lo hemos dicho en otras ocasiones) ya que   de acuerdo a los  conceptos supersticiosos que eructaba  Mao Zedong: “ se tendrán que cumplir por encima de la voluntad del hombre”.

De acuerdo con algunos analistas de la llamada “obra cumbre” de Marx, titulada “El Capital”, cuyo primer tomo se publico en 1867,  eso no fue más que un plagio ampliado del libro “¿Qué es la propiedad?”, del francés Pierre-Joseph Proudhom, publicado en 1840, resaltando que el francés seguía las ideas libertarias que eran contrarias a los planteamientos totalitarios de Marx, el cual consideraba que mediante la dictadura se llegaría al paraíso (sin Estado), ignorándose en cuántos milenios, debido a que  cuando una dictadura comunista se toma el poder en las naciones es por toda la eternidad, llegando a fundar monarquías como ocurre en Norcorea  con los Kim.

Los fracasos del marxismo en casos concretos como el de la caída del muro de Berlín en 1989 y la debacle de la URSS en 1991, en una forma cretina lo explican los comunistas totalitarios, como una mala aplicación del marxismo, o una pésima interpretación del mismo  o que el fracaso fue del revisionismo; cuando la esencia del marxismo es el absolutismo que considera al Estado como si fuera su dios “principio y fin de todas las cosas”, dado que el comunismo totalitario junto al fascismo y al  nazismo siguen la escuela hegeliana, de ahí que la falta de vigencia histórica del marxismo se tiene ver, por lo inhumano de sus planteamientos.

EL genocida de  Lenin fiel seguidor de Marx, planteaba  que para que existiera una situación  revolucionaria, las masas deberían sufrir más de lo habitual, eso es concordante con la desenmascarada que le hizo Bakunin a Marx en la  Internacional de los trabajadores en el siglo XlX, porque el dirigente libertario de manera diáfana le esbozó al padre del comunismo totalitario lo que pensaba acerca del Estado que concebía Marx, y le decía: “La esclavitud política del Estado, reproduce a su vez y mantiene la miseria como condición de su existencia”, lo que significa que los comunistas necesitan  de la  miseria de las masas no solamente para conquistar el poder, sino   también para perpetuarse en él, sin importarle un bledo  el desarrollo social y humano de los pueblos, y esos casos los tenemos de forma patética aquí Latinoamérica con  las naciones que han caído en el socialismo del siglo XXl, que según Fidel Castro(1926-2016) es el que el mismo Marx definió como comunismo, afirmación hecha en el 2010.

Los seguidores del marxismo como cualquier otra secta, dicen que es “todopoderoso” porque es exacto, lo cual es completamente falso, en vista de que el arma predilecta del comunismo totalitario durante su existencia ha sido la bestialidad. Y Antonio Gramsci, comunista italiano quien murió en 1937, hace un batiburrillo malévolo entre el maquiavelismo y el marxismo, en donde la razón desaparece, para dar paso al “todo vale” y  alcanzar la dirección del  Estado, dándole connotación de príncipe al partido comunista o a las caretas que se utilicen  para engañar al pueblo.

El ignominioso marxismo no es científico si no supersticioso, al ser desastroso para la humanidad, porque  la ciencia es el conocimiento exacto que se da por medio del estudio, la experimentación y la observación, buscando el bienestar de la humanidad, pero el marxismo por ser la organización criminal  más grande que se conoce en todos los tiempos  es  enemigo del género humano, cuyas camarillas lo que les interesa es el poder sin importarle el sufrimientos de la población, como lo vemos con toda claridad  en los países que han caído bajo la férula del comunismo totalitario.

La maldición comunista que creó el señor Marx, también tienen una repercusiones  catastróficas para el planeta, es el caso inocultable de China, país manejado por una camarilla marxista que es la nación más contaminadora de la tierra  por los gases de efecto invernadero que envía a las atmósfera, cuya cifra es  cercana a  13 mil millones de  toneladas de dióxido de carbono anualmente, más del doble que EEUU; siendo China  responsable del 30% de las emisiones totales de CO2. A lo que indiscutiblemente se debe agregar la responsabilidad del Partido Comunista de China en el origen y la propagación por el mundo del Covid-19, que ha causado millones de muertos e infectados, siendo la peor tragedia en la tierra después de la Segunda Guerra Mundial.

Surge la pregunta:  ¿por qué el país asiático llegó a esa situación, de ser el primer responsable de poner en peligro la vida en la tierra con la contaminación ambiental? Sencillamente porque hace 45 años la cúpula del Partido Comunista de China sabia que el socialismo planteado por Marx era inviable, entonces para no perder el poder político ante los levantamientos que se estaban gestando, la camarilla del partido optó por impulsar una economía capitalista de libre mercado a cambio de conservar por parte del partido comunista el poder político, y para ello se aliaron con las grandes transnacionales,  superexplotando a los trabajadores chinos; además no se puede pasar por alto que fue  China el país  en donde se cometió el genocidio más grande en la historia, por parte de los  comunistas con 80 millones de asesinatos, durante  la colectivización y la revolución cultural, quedando demostrado las “bondades” del comunismo totalitario que inspiró el señor Karl  Marx.

No cabe la menor duda, acerca de que la dogmática de Marx ha sido una calamidad para toda la humanidad, mírese por donde se mire, y   los 204 años de su natalicio necesariamente representan una fecha luctuosa para el planeta, en donde Colombia con un gobierno comunista de Gustavo Petro, próximamente será parte de las calamidades que generó Marx con  sus enseñanzas en los lugares en donde sus alumnos se toman el poder.

Publicado en Columnistas Nacionales

Compartir

Opinión

Nuestras Redes