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Rafael Uribe Uribe  

La aparición frecuente de nuevos escándalos de estas últimas semanas es extravagante, es hora compatriotas de despertar. La unión es primordial para ganar las elecciones de octubre sin lo cual no habrá forma de recuperar nuestra democracia como sucede en Cuba, Venezuela y Nicaragua. Llamamos la atención a los aspirantes a alcaldías y gobernaciones, despójense de sus egos, desistan si ven sus posibilidades insuficientes para el triunfo y den vía a libre a los candidatos con mayor opción, la patria la debe anteponerse a las aspiraciones personales, es ahora, o nunca.

El apoyo a la gran coalición para modificar las reformas de Petro es indispensable, el mesías dice oír, pero jamás escucha, las propuestas que expertos independientes de los partidos han sugerido han sido desatendidas, se ha multiplicado el valor de la mermelada, aunque por fortuna, la cercanía de las próximas elecciones ha inclinado a congresistas espurios a dar un compás de espera, si pierden alcaldías y gobernaciones de su lado, más tarde perderán sus curules en el congreso; la venda ha empezado a caer de los ojos de ingenuos y, empresarios “esclavizadores”, han caído en la cuenta de los grandes peligros que atraviesa nuestra patria.

Dentro de los caminos más tortuosos está la negociación con toda clase de terroristas y narcotraficantes a los que de ahora en adelante hay que hacerles pasito y, Biden, además, le hace el favorcito al mesías de no hacer monitoreo a los cultivos ilícitos que deben superar hoy las 250 000 hectáreas, estarán felices los “rebeldes” que dominan extensos territorios mientras desmienten declaraciones y trinos del gobierno como lo han hecho el ELN y el pastorcito ‘Iván Mordisco’. Otros, se hacen los de la oreja mocha, porque la coca es mucho menos dañina que los hidrocarburos que en el futuro cercano importaremos de Venezuela, ya que los de allá, no contaminan el ambiente.

Esperemos el regreso de Bruselas del mesías, si es que no se pierde o embolata, allí defenderá con ahínco sus teorías de la química del capital que contribuye al calentamiento global que devastará la humanidad si no nos acogemos al decrecimiento benéfico; obtendrá fondos para “pagar para que no maten” los bandidos, perdón, las hermanitas de la caridad; tratará de emular a su compinche en el premio Nobel de la paz, que cambiará, obviamente, por el de economía en la que ha demostrado maestría.  

Para cerrar con broche de oro ya está en trámite la importación de médicos venezolanos entrenados en Cuba, su deber primordial será el adoctrinamiento de las comunidades más pobres, como lo ha pretendido siempre.

Ya que las calles le han sido exiguas a Petro aprovechemos este día para demostrarle que los que estamos en contra de su gobierno somos mayoría.

El Rincón de Dios

Las palabras de la oración de Cristo en Getsemaní prueban la verdad del sufrimiento". San Pablo II

Publicado en Columnistas Nacionales

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