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Tomás Castrillón O.    

Desde épocas lejanas, las comunidades suelen exclamar la frase: “¡LO QUE FALTABA!” para referirse a hechos inaceptables e inverosímiles. También se suele decir que: “Se está tocando fondo”, cuando gracias a la pérdida de los valores y principios lo mismo que la del respeto a las instituciones y las leyes, resulta que: ¡ya no hay el tal “fondo”! También, y en Colombia específicamente, ha venido ocurriendo con mayor frecuencia cada vez, la presencia de acontecimientos que eran “imposibles de ocurrir sino fuera porque ya ocurrieron”.  Ante este panorama, surge la inquietud relacionada con lo que ha de venir en el futuro, es decir: ¡LO QUE FALTA!

Tal preocupación se debe fundamentalmente, a las actuaciones del gobierno nacional actual, por lo que es preciso referirse, en forma específica, a algunas de las más recientes.

Característicamente, el movimiento mamerto, o sea la extrema izquierda ampliamente representada en el gobierno actual, ha hecho gala de su habilidad para eludir las responsabilidades propias, y es así que, por ejemplo, recientemente utilizaron el “cambio” consistente en la “reversa sincronizada”, para negar la autoría de la tal búsqueda de la Paz Total, ahora, con el país incendiado, empiezan a hablar de la Paz Parcial respecto a uno de los tantos cambios pregonados continuamente. En este campo, se dice ahora que están en “pausa” las tales “conversaciones” con los delincuentes terroristas del ELN en La Habana con los “garantes” de siempre, mientras dicho grupo “analiza” las declaraciones del presidente. ¡LO QUE FALTABA! Y seguramente “LO QUE FALTA”, o sea lo que viene, es otro acuerdo espurio de impunidad traicionando a la patria.

También, ocurrieron recientemente “cambios” en el gabinete ministerial, y haciendo referencia específica a los ministros del interior y de salud, parodiando al juego infantil, apareció la frase: “De San Carlos viene una “chuspa” cargada de …”. Siendo la respuesta inmediata: “De mermelada y confrontación”. En épocas no muy lejanas se hablaba de “Zanahoria y garrote”.

Es preciso aclarar que una “Chuspa es un bolso o morral” según la RAE, nombre muy difundido en Suramérica, que, en este caso-. viene, repleto de “mermelada”, o sea, el elemento necesario para “convencer” a los parlamentarios reacios a aprobar las reformas propuestas por el mandatario actual. También, es preciso recordar, que el nuevo ministro de salud se ha caracterizado por confundir siempre las palabras “conciliación” y “confrontación”, olvidando, además, aquello de que: “Por el tono matan”, como lo demostró en su primer ataque a los profesionales de la medicina, siendo él, también médico, por el manejo que se dio recientemente a la pandemia.

Los “cambios”, o sea las propuestas populistas del mamertismo, lejanas de la realidad nacional, desconociendo la institucionalidad y leyes vigentes, están ampliamente presentadas en las reformas a la salud y el trabajo del actual gobierno, y, por lo tanto, también han merecido la aplicación de la frase ¡LO QUE FALTABA! Y en el caso de su eventual aprobación por parte de en un parlamento “fácil de convencer”, gracias al accionar de los dos ministros mencionados, utilizando todas las “formas” de influenciamiento, incrementan la preocupación por lo que ha de venir: ¡LO QUE FALTA!

Y ocurren muchos más casos. Recientemente, por ejemplo, se presentó otro “cambio” protagonizado por el inefable, Roy Barreras al salir “por la puerta de atrás” de la presidencia del congreso, al ser anulada su curul por el Concejo de Estado por “incurrir en doble militancia”. Además, según ha trascendido, tiene pendiente algunas investigaciones en la CSJ. Ahora, lo presentan, “gracias a su excelente trayectoria por la carrera diplomática”, como embajador ante el Reino Unido. ¡LO QUE FALTABA! Y tristemente se percibe que “LO QUE FALTA” es un mayor deterioro de la imagen del país ante el mundo, labor en la cual ya se han adelantado otros embajadores como el también inefable Benedetti y la misma vicepresidenta.

También, localmente en la ciudad de Medellín, el mamertismo encabezados por el “enviado”, el señor alcalde, ha propiciado numerosos “cambios”. Se percibe como ha   transformado la sede municipal en la Alpujarra en la sede de su partido, y también que en medio de las actividades propias de su campaña para acceder a la presidencia, “no dudó en sacrificar la reputación de tele Medellín (el canal local de TV) con programación manipulada y contrataciones irregulares para comprar su imagen”, como manifestó una columnista del diario local. Asimismo, en dicho diario, al editorializar sobre “El abuso de poder”, se hizo mención de abusos cometidos por uno de sus más allegados colaboradores. Todo esto y mucho más como el pedido de mayores recursos financieros, como las transferencias de las EPM; al respecto, existe la percepción de que fundamentalmente se debe al hecho de que las campañas políticas son muy costosas.  En consecuencia, permanentemente se origina en gran parte de la comunidad local, la exclamación ¡LO QUE FALTABA!

Ante tantos hechos que ameritan un análisis serio de la gestión de los gobiernos actuales, surge un mayor fraccionamiento en la contraparte. ¡LO QUE FALTABA! No son entonces infundados los temores por ¡LO QUE FALTA! o sea la permanencia en el poder del movimiento mamerto, el “atornillamiento” de los comunistas Juanito.  

En consecuencia, es una cuestión de supervivencia que la comunidad, antes de depositar su voto en las próximas elecciones, analice muy bien la situación política nacional considerando las trayectorias y las propuestas de los numerosos candidatos.

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