Facebook

     SiteLock

Última hora
El golpe de Estado de Petro - Miércoles, 15 Mayo 2024 02:47
Pruebas del montaje, Ecopetrol, Santos - Miércoles, 15 Mayo 2024 02:47
La guerrilla que gobierna - Miércoles, 15 Mayo 2024 02:47
Petro y el bonapartismo - Miércoles, 15 Mayo 2024 02:47

El Tiempo (Editorial) 

En medio de propuestas de campaña de acabar la exploración, la empresa toma la ruta de la sensatez.

El viernes pasado se conmemoró el centenario de la refinería de Barrancabermeja, un hito en la historia del sector petrolero en Colombia. En ese puerto santandereano, cuna nacional de la industria del crudo, el presidente Iván Duque celebró este aniversario como los “100 años de la capacidad de nuestro país de tener independencia energética”.

El primer mandatario también se refirió a Ecopetrol como “un activo de la Nación” que “no es solamente una empresa de petróleos”. Y es ahí precisamente donde está la brújula que guía la hoja de ruta que recientemente la petrolera estatal anunció para los próximos 18 años. La estrategia empresarial hasta 2040, llamada ‘Energía que transforma’, contempla una inversión anual de entre 5.200 millones y 6.000 millones de dólares, una producción de 850.000 barriles de petróleo diarios y unas transferencias a la Nación de entre 13 y 20 billones de pesos al año.

La ruta de la compañía colombiana con mayores ingresos está construida alrededor de una “transición energética ordenada”, esto es, manteniendo en el centro la explotación y el transporte de hidrocarburos, ampliar proyectos y negocios renovables, sostenibles y bajos en emisiones. Por esa razón, la estrategia para 2040 incorpora el desarrollo tanto de la exploración costa afuera y los yacimientos no convencionales como del plan estratégico de ISA en transmisión de energía; en inversiones tanto para aumentar oferta de gas y de transporte como para incursionar en nuevos frentes energéticos como el hidrógeno. Tanto el avance en la delimitación de los pozos de gas costa afuera del golfo de Morrosquillo como el anuncio del índice de reposición de reservas del 200 por ciento van en esa dirección.

La estrategia de Ecopetrol no solo es importante para el sector de hidrocarburos y los mercados, sino también para el Estado y el conjunto de la sociedad. El grupo empresarial es un actor crucial en las finanzas públicas y en el desarrollo de las regiones productoras vía regalías, impuestos, dividendos, compras de bienes y servicios locales y entrenamiento y capacitación de personal local. Y mucho más recientemente, una pieza clave en la descarbonización de la economía nacional por medio de su rol en la política de transformación energética.

No obstante el buen momento que atraviesa el sector petrolero por los precios del Brent por encima de los 90 dólares y los positivos resultados financieros de Ecopetrol, la incertidumbre política se cierne sobre el grupo empresarial estatal. En la mesa de la campaña presidencial está la propuesta de la oposición de detener las futuras explotaciones de crudo en el país, que le haría perder de inmediato el norte a esta hoja de ruta.

En entrevista con este diario, Felipe Bayón, presidente de la compañía, invitó a los aspirantes a la presidencia a sentarse para “explicarles desde los números, porque las decisiones tienen que darse con hechos, datos y cifras”. Esa es la reacción de un líder empresarial que conoce su negocio, la dirección de futuro al que se dirige y sabe que su compañía está lista para la transición energética. Es un llamado sensato que todos los precandidatos deberían atender para construir sus propuestas en política energética.

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

https://www.eltiempo.com/, Bogotá, 20 de febrero de 2022.

Publicado en Otras opiniones

Compartir

Opinión

Nuestras Redes