Por el río Magdalena ha corrido buena parte de la historia del país. Crónicas afirman que por él viajaron los españoles en los tiempos de la conquista y la colonia y que, más adelante, por sus aguas navegaron el desarrollo y el progreso en los siglos XVIII, XIX, e incluso a comienzos del XX. Pero, desafortunadamente, por privilegiar otros modos, poco a poco nos fuimos olvidando de él, le fuimos dando la espalda.
Por eso, uno de los desafíos que le impuso el presidente Iván Duque al sector transporte, desde el primer momento, fue buscar la manera de devolverle la navegabilidad a nuestro gran río. Hoy, con la apertura del proceso de licitación de la asociación público-privada (APP) del río Magdalena, el Gobierno les cumple con hechos al país, a Barranquilla, al Caribe y a los departamentos ribereños. Es otra Concesión del Bicentenario que inicia este proceso y, además, es una APP llena de hitos. Uno de los más importantes es que es la primera concesión de quinta generación de un modo diferente al carretero en entrar en licitación.
Con esta APP garantizaremos la recuperación de la navegabilidad por el río Magdalena entre Barrancabermeja, en Santander, y Bocas de Ceniza, en Barranquilla, las 24 horas del día, los siete días de la semana. Para lograrlo se realizarán actividades de dragado, construcción de estructuras de encauzamiento, protección de orillas y mantenimiento de tajamares, entre otras, a lo largo de 668 kilómetros de cauce.
Gracias a este proyecto, el Magdalena se convertirá en una pieza transversal del transporte intermodal en el país, potenciándose como parte integral de un corredor logístico estratégico donde se articulan río, tren y carreteras. Esto a través de una inversión de cerca de 1,5 billones de pesos, que le permitirán al proyecto generar alrededor de 12.000 empleos.
Entre los hitos para recalcar del proyecto está su impacto en términos de reactivación económica para 69 municipios ribereños de siete departamentos, lo que dejará más de 6 millones de colombianos beneficiados.
Esta apertura es el resultado de un trabajo decidido, responsable y articulado de diferentes estamentos del orden nacional, que bajo el liderazgo del Ministerio de Transporte entendieron su importancia y se unieron para sacarlo adelante y generar la mejor APP posible. La Vicepresidencia de la República, Cormagdalena, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), la Universidad del Norte y el Instituto Alexander von Humboldt, entre otros actores, estuvieron presentes en un proceso que, además, fue acompañado permanentemente por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para asegurarnos que, desde su estructuración, se cumplieran los más altos estándares.
La presencia del BID permitió que importantes firmas consultoras nacionales e internacionales aportaran a esta licitación. Entre ellas se encuentran Royal Haskoning, Maritime & Transport Business Solutions, Environmental Resources Management, Ernst & Young y Durán & Osorio. Gracias a todo esto, estamos convencidos de que tenemos un proyecto atractivo, bancable y realizable, el cual hará que todos volvamos a mirar hacia el Magdalena, que poco a poco recuperará la importancia que nunca debió haber perdido.
Con la apertura del APP del río Magdalena avanzamos en la repotenciación económica del país, a través del desarrollo de infraestructura de transporte, que nos permite conectar las vidas de los colombianos. El río Magdalena empieza una nueva etapa que no tiene marcha atrás y lo consolidará como el pilar fundamental de nuestra competitividad y desarrollo. Hechos como este prueban el compromiso del Gobierno con los colombianos, ya que gracias a este proyecto, por las aguas del Magdalena navegarán la reactivación, el crecimiento y la pujanza de toda la nación.
*Ministra de Transporte
https://www.eltiempo.com/, Bogotá, 30 de octubre de 2021.