Los pecados y trampas de la paz
Pedro Aja Castaño
Pero en el caso de un proceso de paz, la palabra “paz” no puede ser confundida con “conversión”, como si se tratara de un camino espiritual. El general prusiano Von Clausewitz definió la POLÍTICA como la continuación de la guerra por otros medios; por lo tanto, EL PROCESO DE PAZ DE COLOMBIA, en esta etapa, se puede interpretar como la continuación de la GUERRA por otros medios. (LA CONTINUACIÓN DE LA GUERRA POR OTROS MEDIOS, Aldo cívico, 23 de octubre de 2012, El Espectador)
La burla de las Farc
María del Rosario Guerra
Han pasado cinco años desde que el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos le dio la llave de la impunidad a las Farc. Desde el 24 de noviembre de 2016, y como lo advertimos muchas veces quienes fuimos y seguimos siendo críticos de ese acuerdo construido en La Habana, los responsables de los peores crímenes, aberraciones y ataques contra miles de colombianos viven hoy a costillas del Estado, sin pagar un solo día de cárcel e incluso algunos de sus máximos líderes premiados con curules en el Congreso. Desde ahí han usado su curul para negar descaradamente la comisión de delitos como reclutamiento, secuestro, violaciones, terrorismo e incluso narcotráfico, actividad ilegal que en 2014 ubicó a las Farc como el tercer grupo narcoterrorista más rico del mundo, según la revista Forbes.
Paz incompleta
Fernando Cepeda Ulloa
No hay que hacerse ilusiones. El camino hacia la paz todavía tiene un largo trecho por recorrer. Y nada fácil. Veamos.
Cooperación en vez de intervención
Mario González
La presencia y activismo del secretario general de la ONU en Colombia, Antonio Guterres, expresidente de la internacional socialista, suscitó nuevamente el debate cada día más candente que sacude hoy al mundo, relativo a la coexistencia de la soberanía nacional con la que correspondería a las organizaciones internacionales.
Cinco años del pacto Santos-Farc
Rafael Nieto Loaiza
Cinco años del pacto de Santos con las Farc. No sobra recordar que ese pacto no es un tratado internacional. Las Farc no tenían ni tuvieron nunca la naturaleza de sujetos de derecho internacional con capacidad de celebrar tratados. El acuerdo fue solo eso, un pacto político entre un jefe de Gobierno y un grupo armado ilegal. Nada más. Tampoco está de más reiterar que, después de ser sometido a un plebiscito y ser rechazado por las mayorías, no era obligatorio ni siquiera para quienes lo firmaron. Desde entonces, tiene un insuperable déficit de legitimidad.
Salvar a EPM
Jorge Eduardo Cock
Es no menos que horroroso, increíble e irresponsable el daño que, según informa el diario EL COLOMBIANO en su edición del domingo 14 del corriente mes, en sus páginas 6 y 7, le están haciendo a las Empresas Públicas de Medellín (EPM), como ya en toda Colombia y en muchos países la conocemos y muchos la queremos. Y es por eso y a eso que tenemos que buscarle y encontrarle verdadera salida y solución eficaz.
Dos cabalgan Juntos
Lluís Bassets
Ambos ya son de hecho presidentes vitalicios. Nadie les rechista. Sus modos son expeditivos con quienes se cruzan en su camino. Concentran tanto poder personal como Josef Stalin y Mao Zedong. Comparten la misma misión, basada en una antigua nostalgia y un renovado resentimiento. Se proponen recuperar los imperios perdidos, aunque ni siquiera es seguro que los títulos de propiedad que exhiben, uno respecto a Ucrania y el otro respecto a Taiwán, sean ciertos y legítimos. Será la revancha por las humillaciones sufridas. En manos de Occidente, naturalmente.
Espuria tasa de cambio
Rafael Rodríguez-Jaraba*
Con la descomunal devaluación que sufrió el Peso frente al Dólar al culminar la semana, nuevamente quedó demostrada la insaciable voracidad de los establecimientos de crédito y en especial de los bancos, que cada vez que se les antoja, alteran la tasa de cambio a su favor desafiando la autoridad cambiaria e infligiendo inestimables daños al mercado.
Que siga la “Farcsa”
José Félix Lafaurie
Discrepo del expresidente Uribe en su carta al secretario general de la ONU, cuando afirma que “acuerdo de paz no ha habido”, porque sí lo hubo, pero entre un gobierno que representa a 50 millones de colombianos y unos narcoterroristas que no representaban a nadie. Una verdadera “farsa”, sinónimo de montaje, de mentira, así como “farsante” lo es de mentiroso.
¿Será justicia contra Uribe?
Armando Barona Mesa
Hay muchas cosas repudiables: la injusticia es la primera. Tal vez el mayor crimen que pueda cometer un hombre es lograr la condena, a sabiendas, de un inocente. Ocurrió por ejemplo contra Dreyfuss a finales del Siglo XIX, a quien a sabiendas de su inocencia condenaron a prisión en la Isla del Diablo y solo después de muchos años, bajo la pluma y el verbo de Emile Zola con su famoso ‘J’Acuse’, se corrigió la injusticia depravada y se absolvió al inocente, quien pocos meses después falleció por la enfermedad que había contraído en el injusto cautiverio.*
Más...
Petro y el petróleo
Ossiel Villada
Semanas atrás Luciana, mi pequeña de seis años, me lanzó esta ‘perla’: “Tata, no debemos usar el carro para ir al supermercado, porque es muy cerca y los carros contaminan el planeta; debemos ir caminando”.
El bazar de los principios
Luis Guillermo Echeverri Vélez*
La verdad nuestra sociedad perdió totalmente el sentido de la importancia ética de la sanción social.
Ganadores y perdedores de ‘la paz’
Diego Martínez Ll.
Un acuerdo es bueno y justo cuando las partes que lo suscriben se benefician por igual del mismo.
No es Quintero Calle, es el IPP, y adelante con la revocatoria
Luis Guillermo Vélez Álvarez*
En el último año -octubre de 2020 a octubre de 2021- el Índice de Precios al Productor (IPP) aumentó 14,6%. Esta es una noticia mala para los habitantes de Medellín y de toda Colombia porque las tarifas de los servicios públicos domiciliarios aumentan al ritmo del IPP. Según la regulación, cada vez que el IPP acumula una variación de cierto porcentaje, las tarifas lo hacen igualmente. Es por eso que las tarifas de los servicios públicos domiciliarios han venido aumentando aceleradamente y continuarán haciéndolo en el futuro si el IPP continúa aumentando a ese ritmo.